Saturday, August 16, 2008

Ref. #59, El petróleo está en los US$114.60 el barril

William Jerez NYC 08/16/08
www.dominicanissues.com www.wjerez.blogspot.com

A) La situación energética actual de la República Dominicana, por un año y con la información dada por el Gobierno, con el precio promedio del petróleo a US$114.60/barril de lunes (08/11/08) a viernes (08/15/08), es la siguiente:

Datos fijos semanalmente:

1) 140,000 b/d
es el consumo petrolero actual de la República Dominicana.

2) Unos 40,000 b/d son adquiridos en Venezuela con pagos a largos plazos a un 17% más barato que el petróleo de Texas.

3) US$9,879 millones de dólares es el nuevo presupuesto nacional del 2008.

4) 3.3 E 14 BTU/año es la energía que requerimos comprar en petróleo.

5) US$193.33/barril es el punto de equilibrio con los US$9,879 millones de dólares del presupuesto de la nación dominicana en este año.

Datos variables semanalmente:

1) US$5,856millones /año gastaríamos en petróleo en un año.

2) 59.28% de presupuesto se gastarían en comprar petróleo en un año.

3) *US$1,171 millones/año cantidad “evaporada” de la factura petrolera.

*La cantidad de US$1,171 millones/año es antes de los impuestos al consumidor de petróleo y derivados. Y esta cantidad no incluye el carbón que compra el país

B) Algunos comentarios semanales para reflexionar

1) Los apagones y las enormes riquezas acumuladas. La Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) pide a la ciudadanía que comparta los problemas que “escapan al control estatal”. ¿Y de dónde han salido las enormes riquezas que han acumulados los nuevos tutumpotes y altos dirigentes peledeistas?

¿Cómo es posible que se le pida a la población que comparta los apagones si se le excluye de las enormes riquezas que han acumulado los altos dirigentes del actual Gobierno?

2) A Najayo los funcionarios corruptos. Al presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Jorge Subero Isa, hay que apoyarlo si lleva a cabo la investigación y se llevan a la Justicia a los funcionarios que no puedan explicarle a la ciudadanía el origen de sus grandes fortunas que hoy exhiben.

Pero también la investigación debe cubrir el caso de la Sun Land en que hay envuelto unos US$130 millones de dólares. Esta actitud tiene que aplicarse a los actuales y pasados funcionarios de las tres administraciones de los tres partidos tradicionales: el PRD, el PLD y el PRSC. Si esto es verdad, son muchos los funcionarios que caerían presos por su insaciable apetito por las cosas materiales. Especialmente por el dinero.

3) Las energías renovables y la nueva gestión de Leonel. Sigue en el tapete de los funcionarios corruptos de este Gobierno el asunto de las energías renovables. Todo es una verdadera distracción, una mentira y un engaño a la población. Hemos dicho y hemos hecho hincapié en que las energías renovables desarrolladas todas con altas tecnologías, y a nivel de los países desarrollados, nos podrían suplir un 5% de nuestras necesidades energéticas de 3.3 E 14 BTU/año.

¿Y como le vamos hacer con el 95% de los 3.3 E 14 BTU/año que requerimos comprar en petróleo? O sea, el 95% de 140,000 barriles/día de petróleo. Estamos hablando de 133,000 barriles/día de petróleo que tenemos que seguir comprando. Y todo, asumiendo que desarrollemos las energías alternativas.

¿De dónde sacaríamos el dinero para comprar 133,000 barriles de petróleo extra asumiendo que desarrolláramos todos los proyectos de energías renovables de que hablan los farsantes que andan como buitres detrás de la vaca moribunda, la República Dominicana?

En el discurso de la toma de posesión al presidente Leonel Fernández lo pusieron a decir que solamente en energía eólica el Gobierno tiene un proyecto de 700 megavatios. Buena suerte con este proyecto.

¿Por qué el presidente Fernández no habló primero de manejar con transparencia la factura petrolera de US$5,856 millones de dólares y de evitar la “evaporación” de unos US$1,172 millones de dólares? Ah…, esto no. Solamente se limitó a decir que la factura petrolera ha aumentado en un 400%.

¿Y por que no habló primero de evitar la corrupción en todos los renglones importantes del país, especialmente en el sector energético?

4) Otra vez la juramentación de Leonel Fernández. Hoy se acaba de juramentar Leonel para otro período presidencial de cuatro años. Cuatro años más oyendo las mismas distracciones, las mismas mentiras y los mismos engaños. Y lo peor aún, viviendo la misma corrupción rampante que reina en la República Dominicana.

En su discurso, no hubo nada nuevo. Como siempre, solamente promesas y más promesas.

Según Leonel, montones de proyectos se van a realizar en los próximos cuatro años de Gobierno. En todas las áreas y en todo el país habrá proyectos.

Aunque no hay un centavo en las arcas del Estado, el presidente habló de tantos proyectos que se hace difícil enumerarlos. Lo único es que como he dicho antes: todo es distracción, mentira y engaño. Y los dominicanos conocemos muy bien el culebreo del presidente Leonel Fernández.

Aquí cabe una simple pregunta, ¿Cómo es posible que con la disminución de la calidad de vida en los cuatro años que acaban de pasar, y con un petróleo relativamente barato, no se realizaron esos montones de proyectos de que habla el presidente Fernández para los próximos cuatro años?

A su fracaso total en su pasada gestión en todo momento de su discurso le echó la culpa, no a la corrupción rampante de su Gobierno, sino a los precios del petróleo y a la especulación petrolera.

La verdad es que no vale la pena oír y comentar el discurso de Leonel. Y aquel que no lo vió no se perdió nada.

No hay dudas de que los dominicanos aguantamos muchas “cajetas”. No sé como los dominicanos vamos a aguantar a Leonel y a su pandilla de funcionarios corruptos cuatro años más.

Y pensar que después de estos cuatro años, si es que los dominicanos los aguantan, Leonel quiere seguir en el poder indefinidamente haciendo precisamente lo que hasta hoy ha hecho: destruir el país a todos los niveles.

La inmensa gran mayoría de funcionarios de Leonel a diario se disputan quien “trabaja” más duro. El que más “trabaje”, sale del Gobierno con más bienes producto de su “trabajo”.

La población decidirá hasta cuando va a soportar a esta bola de “trabajadores”.

5) Cotuí y los demás pueblos comienzan a despertar. Tanto como Cotuí, los demás pueblos del país comienzan a despertar de sus sueños en que han creído en este Gobierno de distracciones, de mentiras y de engaños. Con respecto a Cotuí y el Cibao Oriental yo me hago unas simples preguntas,

¿Cómo es posible que a Leonel Fernández, dentro de los tantos proyectos (?) que mencionó, se le haya olvidado el “chin” de carretera de Piedra Blanca-Cotuí bordeando la presa de Hatillo? ¡Eso se llama tener a Cotuí presente…!

¿Cómo es posible que Cotuí y el resto del Cibao Oriental teniendo una de las principales presas y el río más caudaloso del país se les de un promedio de cuatro horas al día de electricidad?

Es por esta razón que casi todos los negocios de Cotuí y el Cibao Oriental están casi quebrados. Pérdidas millonarias se han sucedido en casi todos los pueblos de dichas regiones mientras los sectores donde viven los jorocones peledeistas en Santo Domingo tienen electricidad casi las 24 horas diarias.

¿Y cómo es posible que teniendo una de las principales presas de la República Dominicana la gente de Cotuí se esté cayendo a pedazo mientras los funcionarios de este Gobierno se han adueñado, para beneficios propios, de una de las presas más grandes del país?

Yo creo que la electricidad debe de ser distribuida equitativamente. No debe haber privilegio en esta distribución. Todo debe de hacerse pensando en lo que más conviene a las comunidades del país.

Todo el Cibao Oriental debe de ser abastecido de electricidad con la presa que tenemos en Cotuí.

¿Y dónde están los dirigentes de Cotuí, Provincia Sánchez Ramírez, para que ayuden a la población en su lucha en contra de los apagones, la corrupción y otras reivindicaciones sociales?

C) SALVEMOS AL PAIS DE LA GRAN CRISIS ENERGETICA
DE NUESTRO PLANETA TIERRA


Medidas en grandes para ahorrar energía: el CEN y los SEPs.

Como ya el petróleo anda por el precio de los US$114.60/barril, creo conveniente optimizar cada gota de petróleo que compre el país. Yo propondría tomar las siguiente medidas, entre otras:

1. Hacer un llamado urgente a los profesionales honestos y serios que residan en el país y que conozcan y estén fogueados en asuntos energéticos: petróleo y derivados, carbón, gas natural, gas licuado, y las energías renovables, para que presenten sus candidaturas y sus “resumes” para optar por posiciones en el campo energético.

2. Seleccionar entre los referidos profesionales más capacitados y honestos y ponerlos al frente de las más importantes instituciones energéticas del país: la Comisión Nacional de Energía, la Secretaria de Industria y Comercio, el Indotec, Digenor, etc. Estas personas formarían el Consejo Energético Nacional (CEN).

Dicho Consejo podría estar integrado por unas 6-10 personas que decidan hacer sus vidas estrictamente de un sueldo modesto que les permita vivir holgadamente. Esto último le permitiría pensar en el país el mayor número de horas diarias. Y al frente de dicho Consejo, estaría el Presidente de la República para escuchar consejos sobre energía de personas honestas, serias, capaces y conocedoras del campo energético. Permítanme repetir: personas capaces y honestas que residan en el país.

3. El Consejo Energético Nacional (CEN) podría tener su asiento en Santo Domingo. Los profesionales seleccionados para formar parte del CEN, escogerían los miembros de Subconsejos Energéticos Provinciales (SEPs) en las 32 provincias del país. Los Subconsejos Energéticos podrían estar integrados por unas 3-5 personas a los cuales se les pagaría una modesta y simbólica suma de dinero por una reunión mensual en sus respectivas provincias. Las funciones de los Subconsejos, entre otras, podrían ser la identificación de posibles focos energéticos de cada provincia, la supervisión de proyectos energéticos en sus provincias, servir de “watchdogs” a los miembros del CEN y dar recomendaciones al CEN de ahorros y conservación energética de sus provincias.

4. El CEN y los SEPs provinciales podrían reunirse en Santo Domingo dos veces al año para discutir el futuro energético de la República Dominicana.

5. Como el CEN reemplazaría a la inoperante y actual Comisión Nacional de Energía (CNE), las facilidades del edificio que ocupa actualmente la Comisión Nacional de Energía (CNE), incluyendo su personal, pasarían a ser ocupadas por el referido Consejo Enérgico Nacional (CEN).

6. La Superintendencia de Electricidad, así como la CDEEE, esta última con asiento en La Feria, pasarían a ser dependencias del Consejo Energético Nacional (CEN).

7. Actualmente a cada barril de petróleos y derivados, la corrupción generalizada del país le saca más del 50% de beneficio. Estamos hablando cuando estamos comprando un petróleo a Venezuela más o menos un 17% por debajo de los US$114.60/barril que es el precio actual del petróleo de Texas.

8. Modificar la Ley de Hidrocarburos y sustituirla por una ecuación semiempírica actualizada y automatizada que permita llevarle un seguimiento a los aumentos progresivos del petróleo y a la vez que haya un aumento justo de sus derivados.

Todas estas medidas (del 1 al 8) y otras grandes decisiones energéticas deberían emanar del CEN y de los SEPs. Estas instituciones deberían formarse sin banderín político. Y todo, como un asunto de sobre vivencia nacional. Y no debe de permitirse que ninguna institución burócrata nacional o extranjera esté por encima de las decisiones del CEN y los SEPs.

De no formarse el CEN y los SEPs, que serían los únicos capaces de enfrentar la gran crisis energética actual y futura, el país estaría avocado en un futuro muy cercano, a convulsiones sociales sin precedentes. Y todo, como un asunto de sobre vivencia del ser humano.

Aunque creo que ya se ha hecho un poco tarde, esto o algo similar hay que hacerlo para ofrecerles a los dominicanos una total transparencia en el manejo de los energéticos que compra el país. Pero además, para salvar la nación de la gran crisis energética de nuestro planeta Tierra.